Por Desinformémonos.org
La Delegación de la Unión Europea y organizaciones internacionales como el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh) y Amigos de la Tierra se unieron a la condena del asesinato del padre y defensor tsotsil Marcelo Pérez Pérez, perpetrado el pasado 20 de octubre en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
«Condenamos firmemente el asesinato del sacerdote y defensor indígena de los derechos humanos […]. La muerte del padre Marcelo Pérez muestra el grado de violencia e intimidación que enfrentan muchos defensores de los derechos en México y que constituye una amenaza contra los derechos humanos», señaló la Delegación de la Unión Europa, Noruega y Suiza en un comunicado.
Los países europeos, así como la embajadora de Noruega y Suiza en México, manifestaron su «gran preocupación» por el nivel de impunidad en los casos de asesinato de personas defensoras y periodistas en México, por lo que llamaron a las autoridades mexicanas a investigar el crimen contra el padre Marcelo y garantizar «entornos favorables» para los defensores.
Por su parte, el Copinh condenó «con mucho dolor, tristeza e indignación» el asesinato del sacerdote tsotsil y demandó que las autoridades en México implementen «todas las medidas urgentes y necesarias para garantizar y proteger la vida, la integridad y la seguridad personal de las comunidades indígenas, incluidas las familias de los Bases de Apoyo Zapatista, evitando que la situación de violencia y riesgo denunciada en varias regiones de Chiapas empeore».
Finalmente, Amigos de la Tierra América Latina y el Caribe exigió al Estado mexicano «que cumpla con su deber investigando con profesionalismo el terrible crimen y llevando ante la justicia a los responsables». «No aceptaremos la perpetuación de la impunidad que se ha generalizado en México en las últimas décadas y que tiene a varias regiones del país, incluido el estado de Chiapas, sumidas en la peor espiral de violencia de su historia reciente», subrayó.
Cada día se suman más pueblos, países, organizaciones, colectivos y defensores para condenar el asesinato del padre Marcelo Pérez, quien era reconocido por el pueblo de Chiapas por su labor en defensa de los derechos humanos y quien denunció el incremento de la violencia en la entidad a manos del crimen organizado.
Desde 2015, el párroco contaba con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por las amenazas y los intentos de criminalización que enfrentaba, pero «el gobierno mexicano no fue capaz de atender sus demandas y garantizar las condiciones de seguridad necesarias», aseguró el Grupo Núcleo de Indigenous Peoples Rights International (IPRI) en México.
A continuación el comunicado completo de la Unión Europea: