Por Jaime García Chávez |
Finalmente el PAN y sus aliados le pagaron la factura a Javier González Mocken con su elección para presidir la Comisión Estatal de Derechos Humanos, una institución que si en sus años previos había servido para maldita la cosa, hoy cava la tumba de su escasa credibilidad con este chapulín de la partidocracia estatal.
Estamos frente a un oscuro personaje que se inició como porro en favor del PRI en la Universidad de Ciudad Juárez, luego de haber ingresado a ese partido hace poco más de 50 años y en el cual duró hasta 2018. Con la bandera tricolor llegó como suplente de Enrique Serrano a la presidencia municipal de Ciudad Juárez, y luego como interino, entre 2015 y 2016, de la mano del exgobernador corrupto, César Duarte.
Pero como ese barco comenzó a hacer aguas, Mocken, como muchos otros, saltó primero a MORENA, ese partido al que van a dar los sobrantes por reposición de todo el espectro partidocrático y al que se ingresa purificadamente con la sola bendición del altísimo.
Pues González Mocken ganó la elección a alcalde de aquella ciudad fronteriza en 2018, pero un recuento de votos le dio el triunfo al también expriista y dueño de medios, Armando Cabada, quien se declaró independiente, para luego dar el salto, al igual que Mocken, a MORENA.
Pero eso no le bastó al ambicioso González Mocken. Él brincó al PAN donde fue candidato perdedor otra vez por la alcaldía de Juárez, donde finalmente ganó un expanista, Cruz Pérez Cuéllar.
Pero la gobernadora panpriistaduartista Maru Campos Galván no lo dejó solo. Lo convirtió en secretario de Educación y Deporte, cargo al que luego renunció, sabiendo que le debían parte de la factura política.
Ese día se llegó, aunque con cierto anuncio previo. Y ahora, también acogido por Campos Galván y un Congreso mayoritariamente panista, con sus aliados del PRI, lo votaron para que sea el nuevo presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos. ¡Imagínese usted nomás!
Bueno, a esos niveles de degradación llega la política profesional en el poder en el estado de Chihuahua.
No se requiere ser profeta para pronosticar en lo que se convertirá la CEDH en manos de un personaje de este talante. Al tiempo…