Por Guadalupe Ángeles
Otras voces, otras vidas
escucho tras lo que escucho
nos perdemos en los infinitos pasillos de la memoria mi oído y yo.
Veo un amarillo tan profundo
que derramar una gota de café
sobre ese color hechizante
me rodea de miradas silenciosas
¿qué otro animal pudiera ser si no fuera este que soy?
No lucho
me comen los paisajes de esas voces
varios mamíferos han pasado a un lado de la mesa en los últimos días
no podría afirmar si son hipopótamos o bisontes,
por si acaso,
un oso rojo persigue una vocal en el baño
un elefante sostiene el jabón neutro.
Todo color es un pretexto
o una buena razón
ellos mandan
yo solo sostengo el lápiz
hago los movimientos necesarios:
puedo arreglármelas para que un insecto sonría,
para que una mariposa, aún desmembrada, me cuente su secreto.
Y nos escondemos todos:
Insecto, mariposa, hipopótamo, bisonte
en la casa de campaña que hace mi cabello
porque lo que más nos gusta a todos son los secretos,
esos
que nos contamos en voz baja
a media noche.