Los guardianes de la Tierra están siendo asesinados por mantener nuestros bosques y selvas con vida. Y México es uno de los países más peligrosos.
El año pasado, al menos 20 fueron asesinados por protestar ante los ganaderos, madereros o mineros que invadieron sus tierras para explotarlas. 12 de ellos eran indígenas. Y más de 2 mil han sido asesinados en todo el mundo en los últimos años.
Es una tragedia. Los Pueblos Indígenas custodian nuestros bosques y selvas pero no pueden seguir haciéndolo a costa de arriesgar la vida y sus territorios. ¡Hay muchos que ni siquiera tienen plenos derechos sobre la tierra por la que mueren!
Nuestros gobiernos pueden ayudar a acabar con estos crímenes garantizando el derecho a la tierra y el reconocimiento jurídico de los territorios de los Pueblos Indígenas, para que puedan seguir protegiendo los ecosistemas más vitales para el planeta sin morir en el intento.
Suma ya tu nombre en apoyo de los guardianes de la Tierra y entregaremos nuestra petición ante los líderes mundiales en una cumbre de biodiversidad que se celebra este mes en Colombia: