Por Wendy Tagle Carrillo, integrante del equipo que elaboró los nuevos libros de texto
Para los que no me conocen, soy Wendy C. Tagle Carrillo. Licenciada en Educación Preescolar o como mejor se nos conoce “educadora”, egresada de la Normal de Estado y posteriormente hice la Licenciatura en Educación Primaria en la UPN.
No me veo haciendo otra cosa en la vida, que simplemente ser “maestra”.
Desde el año de 1997 se me asignó mi base como “maestra de primaria” en una comunidad rural, así fueron mis inicios, ya que en aquellos tiempos los “maestros” nos íbamos a trabajar a donde nos tocara.
Después de un año me trasladaron a Cd. Juárez y tuve la oportunidad de incursionar en el sector privado, es decir, daba clases en un Colegio Particular como “Educadora” y por las tardes en una escuela “Pública ” en un sector de esos complicados y/o peligrosos.
Soy de esas maestras que mucha gente llama “con vocacion” y en efecto, para trabajar en una profesión que cada vez es más desvalorizada, se requiere “vocación”.
Me desarrollé trabajando en la mañana en preescolares particulares y en primarias públicas por 20 años (ya tengo casi 26 de servicio), pero al llegar aquí a la Cd. de Chihuahua tuve la oportunidad de ser Directora de un Colegio Particular y conjugarlo con mi “Plaza pública”.
Años de correr de una escuela a otra, hasta que un día (no hace mucho) decidí que era tiempo de dedicarme a un trabajo (sector público) y dedicar tiempo a mi casa y familia.
Justo así lo hice, pero los que me conocen bien, saben que no soy de estar quieta.
Hace un año alguien me compartió la convocatoria de la SEP para participar en la elaboración de los contenidos para los LIBROS DE TEXTO. Incrédula pensé que era solamente una pantalla y hacernos creer a los maestros que nos tomaban en cuenta.
Mi sorpresa y porque no decirlo “miedo”, fue el ser llamada para ello, de ahí se inicia todo un largo proceso que la mayoría de la población desconoce, por eso, me permitiré compartir algunos puntos.
No sin antes destacar que no puedo dejar de sentirme “ofendida” por los comentarios sin fundamento de la población en general.
1.Tomamos una capacitación en línea de ABP (aprendizaje basado en proyectos), cosa que para las Educadoras de formación NO es complicado (así nos formamos).
Fueron muchas horas y desvelos realizando trabajos para poder continuar con la metodología.
2. Conferencias a todas horas y debo decir que para los que no podíamos tomar una por el horario de trabajo, teníamos por compromiso que hacerlo en altas horas de la noche.
3. De las conferencias debíamos responder cuestionarios en Google, como evidencia de que estábamos preparándonos para una responsabilidad tan grande.
4. Se nos asignaron tutores, todos ellos profesionales en la materia y por mencionar algunos: doctores en Educación, antropología, filósofos, redactores, psicólogos, maestros en matemáticas, lenguas, entre otros.
“Nada fue al vapor”.
5. Trabajamos en mesas de trabajo con profesionales de la educación y de las asignaturas o campos formativos.
6. Se fueron quedando maestros fuera, ya sea por su voluntad o simplemente así es en las convocatorias.
7. Ningún maestro que participamos recibimos un pago por el trabajo realizado.
8. Conocimos de primera mano los planes y programas de NEM.
9. No elegimos los temas, se nos asignaron y supongo que fue de acuerdo al perfil de cada docente.
10. Los trabajos que realizamos fueron revisados y corregidos una y otra vez por especialistas y tutores.
11. Fue así como la tutora y responsable del campo formativo que se me asignó, me dio la noticia que mi proyecto era el “ganador” para ser publicado. Mi única paga era saber que mi nombre estaría ahí plasmado y que mi sueño de ser maestra desde la edad de 3 años había trascendido aún más.
Hoy quiero (y espero) me leas completo, para que sepas que no pertenezco ni a partidos políticos de derecha o de izquierda, no soy parte de organizaciones no gubernamentales con o sin fines de lucro, tengo mis creencias (fe) bien afianzada desde niña y aun con eso, nada de lo que yo redacté tiene tintes religiosos, sino que se basan en el derecho humano y el respeto a la dignidad, además de los fundamentos legales ya establecidos.
Toda mi vida he sido inspirada en mi trabajo por mi madre y familia, mis alumnos y su entorno también lo han hecho, además de que admiro a grandiosos maestros. Por eso siempre busco hacer lo mejor que esta en mí.
“Todos podemos hacer lo mismo, pero tu hazlo mejor”.
Mi trabajo no está como muchos lo dicen: “sacado de la manga” ya que no suelo improvisar nada en la vida.
Soy MAESTRA apasionada por lo que hago, soy una profesional y me dedico a que mis estudiantes exploren lo mejor de ellos y juntos aprendamos (porque yo no lo sé todo).
No me considero enemiga de nadie, yo busco formar a los ciudadanos del mañana y lo hago con delicadeza ya que mi futuro está en sus manos.
Me indigna la manera en que se ha llevado a cabo todo esto de los libros de texto, ya que aunque no soy autora de la totalidad, me solidarizo ante el gran trabajo que realizaron mis colegas.
Soy y seguiré siendo maestra y siempre he de buscar la justicia y la paz.
Quiero un México despierto y no dormido en la ignorancia en que muchos han querido tenerlo y si para ello hay que luchar más con papel y tinta en mano, lo seguimos haciendo.