Rubén Villalpando/La Jornada
—Con tiros al aire, unos 130 elementos de la Fiscalía General de Chihuahua disolvieron una protesta y plantón que ejidatarios del municipio de Guazapares mantenían contra la mina Coeur Mexicana SA de CV, de capital canadiense, desde el 20 de agosto, para exigir que cumpla con los compromisos pactados por la explotación de plata en su ejido.
Llegaron echando balazos, no se identificaron ni presentaron orden de aprehensión contra los dos hombres que detuvieron, pero traían uniformes y andaban en las unidades de la Policía Estatal, a donde los subieron y se los llevaron, y no sabemos dónde están, dijo un ejidatario.
Ismael Vargas González y José Luis Lozano Mosqueda, los dos ejidatarios detenidos sin orden de arresto durante el desalojo del bloqueo a la mina Coeur Mexicana, fueron ingresados la mañana de este sábado al penal estatal de Aquiles Serdán.
El fiscal del estado, César Augusto Peniche, afirmó que los dos líderes fueron detenidos por una denuncia que interpuso Coeur Mexicana, a cargo de la concesión, y por bloqueo a las vías de comunicación.
Sin embargo, sus compañeros que mantienen el plantón a la mina en el entronque de los municipios de Guazapares y Chínipas, calificaron la medida de abuso de autoridad e injusticia.
Los manifestantes señalaron que alrededor de las 10 horas del jueves hombres armados arribaron al lugar del bloqueo y detonaron armas de fuego para amedrentar a los que permanecían desde hace 10 días en el camino de acceso a la mina, ubicado en el entronque a Guazapares o a Chínipas.
La veta que se ubica en la sierra Tarahumara es considerada la principal productora de plata en el estado y está asentada en tierras ejidales. Los labriegos la bloquearon para que les pague los derechos acordados y cumpla con la contratación de mano de obra local y la edificación de obras sociales para los pueblos.
Los inconformes también mencionaron que a sus líderes y a ellos los amenazaron con acusarlos de obstrucción de vías terrestres, aunque aclararon que estábamos protestando, no bloqueando. Permitimos el ingreso de todos los trabajadores, pero no de insumos y materiales que extraen de la mina y los participantes en su mayoría son adultos mayores, especificaron.
Decenas de ejidatarios aseguran que en lugar de solucionar la petición fuimos reprimidos.
A pesar de lo ocurrido, advirtieron que el bloqueo continuará y ahora será completo, pues anteriormente sólo detenían el ingreso de material como cemento, tubos y mallas, dejando pasar oxígeno, explosivos, alimentos y personal.
Una mujer, quien dijo ser familiar de uno de los detenidos, expresó que los ejidatarios siguen en plantón por incumplimiento de las cláusulas económicas y por la libertad de los presos políticos encarcelados por el gobernador Javier Corral Jurado.
La mujer y varios ejidatarios, la mayoría mayores de 60 años, debido a que los jóvenes huyeron de la región por miedo a grupos criminales, aseguraron que sólo buscan que la empresa minera cumpla con el convenio firmado por explotar tierras ejidales.
Los ejidatarios de Guazapares dijeron que el bloqueo se mantendrá hasta que sus compañeros sean liberados y que no cederán a pesar de las amenazas que han recibido.
Estuvimos recibiendo llamadas donde nos decían que si no levantábamos el plantón los detenidos no iban a salir libres. Presionaron diciendo que querían una respuesta hoy por la mañana y que si no nos movíamos habría otro tipo de consecuencias. Sabemos quién es el que está amenazando y no es gente de la mina, aseguró uno de los manifestantes.
Las empresas, sobre todo las canadienses, las que tienen la mayoría de las concesiones en el estado de Chihuahua, tienen a su servicio a las autoridades estatales y grupos civiles armados que presionan a la gente, dijo la señora via telefónica acompañada de sus compañeros.
Ante esto, los ejidatarios aseguraron que la carretera no está cerrada para los usuarios en general, únicamente para unidades e insumos dirigidos a la mina.