Familiares, artistas, literatos, compañeros y compañeras, entre otras amistades del maestro Enrique Servín Herrera, develaron este viernes la placa Guardián de las Palabras, en el marco del memorial al poeta y defensor de los rarámuri, que cumplió un año de fallecido.
El ceremonial se llevó a cabo en el jardín de la Plaza Cultural Los Laureles (antiguo Cidech), donde se ejecutó un performance artístico que arrojó al vuelo pétalos y poemas durante una emotiva tarde otoñal.
Con el lema “Gracias querido Enrique” y al pie de un obelisco, se recordó su dedicación a promover y proteger las culturas de los pueblos originarios, además de su labor al frente de instancias promotoras de las culturas étnicas y la diversidad en Chihuahua.
Servín fue escritor, poeta, políglota, traductor, asiduo defensor de las lenguas indígenas, reconocido y admirado entre la comunidad cultural e intelectual chihuahuense por su extensa trayectoria, mayormente enfocada a la difusión y conservación de las tradiciones de los pueblos originarios de Chihuahua.
Fue un hombre sencillo, de trato cordial, inteligente y de gran sabiduría, con una enorme capacidad para entender y descifrar las necesidades de los demás, por medio del leguaje, la comunicación y la reflexión.
La noticia de su fallecimiento el 9 de octubre de 2019 causó gran impacto y profunda tristeza en la comunidad cultural y literaria del estado. Asimismo, a un año de su partida, es recordado gracias a su calidad humana y su gran aporte en favor de la cultura.