Texto de Karla Quintana
Fotografías por Raúl F. Pérez
CHIHUAHUA.- En una muestra de solidaridad, diversos colectivos, entre ellos Mx con Palestina, Sandía Libre y Frontera Palestina, convocaron a la ciudadanía chihuahuense de la capital y se reunieron en la Plaza del Ángel el fin de semana pasado. El motivo: iniciar una marcha pacífica en apoyo a los habitantes de Gaza, para exigir la libertad de Palestina y la condena a Israel por sus actos de guerra.
Comenzaron a congregarse en la plaza del Ángel, con pancartas y entonaron consignas como “Señor, señora, no sea indiferente, se matan palestinos en la cara de la gente”. La marcha reflejó la preocupación de las personas por la situación que vive Gaza.
“Esto tiene décadas ocurriendo desde que Israel llegó a ocupar tierras que no eran suyas y empezó a despojar lenta y violentamente a toda la población palestina, esto no empezó el 7 de octubre y la resistencia nunca será terrorista” expresó una manifestante que acompañaba la marcha.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la guerra ha impactado a la población civil, con afectaciones a aproximadamente 30 mil palestinos, de los cuales 13 mil son niños y niñas. Este contexto humanitario urgente fue uno de los principales focos durante los discursos y las inquietudes de la marcha.
Entre los asistentes estuvo Nabil Ayineh, quien nació y creció en un campo de refugiados en Líbano pero su familia es originaria de Palestina al norte en una ciudad llamada Acre (Akka en árabe).
“Cuando era niño yo sufrí de la misma manera. Me dispararon aquí, aquí y aquí” dice mientras señala las marcas en varias partes de su cuerpo.
“Vi los aviones bombardear cuando estaba en segundo grado en Líbano, en un campo de refugiados al norte de Palestina. Mi familia huyó a Líbano en 1948 y yo nací y crecí en un campo de refugiados”, refiere.
Nabil compartió que los aviones F-15 y F-16 israelíes llegaron a bombardear cuando era niño. Entre ese fuego, bajaban escaleras, algunos niños y niñas gritaban, el refugio estaba inundado pero aun así tenían que entrar por su seguridad “después del bombardeo fuimos a casa a ver si nuestra familia estaba viva y vimos a la gente en la calle, entonces sólo si has vivido esa vida sabes lo que realmente está pasando”, relata.
Así como él, otras personas estuvieron en la marcha realizada en Chihuahua para alzar la voz ante el silencio de las autoridades gubernamentales, a las cuales acusan de no respetar los acuerdos internacionales destinados a garantizar la paz y el respeto a los derechos humanos.
“Después de seis meses de lo que se puede describir como un genocidio contra civiles, es necesario hablar”, expresó Diana Gómez, otra de las participantes.
La marcha concluyó con una petición de firmas en conjunto de distintos colectivos para solicitar al Senado de la República Mexicana que revise y, en caso de ser necesario, rompa relaciones con el estado de Israel.