Por Jaime García Chávez
El pasado 25 de marzo el Centro de Derechos Humanos ‘Miguel Agustín Pro’ (Centro PRODH), a propósito del Día Internacional de Derecho a la Verdad, lanzó un documental llamado “Vuelos de la muerte”, que narra, desde una “reconstrucción visual”, el programa militar clandestino y genocida implementado durante la llamada “Guerra Sucia” en México, entre las décadas de los 60 y 80.
Según los creadores del documental, en el que participaron realizadores y cineastas extranjeros, este proyecto se desarrolló “con base en una investigación militar, esfuerzos periodísticos y herramientas de investigación visual”, es decir, algunos aspectos se recrearon con el uso de tecnologías en 3D, a partir de testimonios, mapas y descripciones geográficas de sobrevivientes.
Vale resaltar que e trata de una producción técnicamente impulsada con el apoyo de realizadores extranjeros y no nacionales, que los hay y muy buenos, como los de la película “Heroico”, tan sólo por citar un ejemplo que, además tiene que ver con el desempeño de los militares mexicanos. Conjeturo que si lo hubieran hecho cineastas locales se tendría el riesgo de las represalias, ahora que el Ejército está sumamente empoderado.
El Centro PRODH explica además que se lanzó este proyecto “ante la continua demanda para que el Mecanismo para la Verdad y el Esclarecimiento Histórico pueda acceder a la totalidad de los archivos militares”. De hecho, en el documental aparecen declaraciones del Comisionado de dicho Mecanismo, reclamando desde la tribuna lopezobradorista que los obstáculos que la burocracia del Ejército ha impuesto para ocultar la verdad “se han multiplicado”, al incurrir en “prácticas de ocultamiento de información, por alteración, mutilación e inutilización total o parcial de expedientes”.
En ese video se pone en entredicho la virtual exculpación de las autoridades federales sobre las acusaciones de genocidio recaídas en los jefes militares Francisco Quirós Hermosillo y Mario Acosta Chaparro, señalados como “responsables de diversas atrocidades durante la llamada Guerra Sucia”.
Como se sabe, incluso desde 2018 el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IFAI) le ordenó a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) entregar la versión pública de los expedientes de los militares, sin que eso haya ocurrido hasta el momento. Esto, en medio de una administración que, por el contrario, se ha distinguido por ceder a las Fuerzas Armadas más poder que nunca.
También se cuenta brevemente el macabro periplo de Alicia de los Ríos, y es su hija, del mismo nombre e integrante del Mecanismo referido, quien sintetizó en su intervención en ese evento conmemorativo del Día Internacional de Derecho a la Verdad lo que muchos pensamos: no habrá democracia en México mientras existan desaparecidos. Chihuahua y Ciudad Juárez fueron candentes escenarios de esa Guerra Sucia.
El territorio del estado está abonado con la sangre de mujeres y hombres jóvenes que fueron víctimas de atrocidades exterminadoras, como la que este nuevo documental nos revela, mediante el uso criminal de los llamados “vuelos de la muerte”.
Este trabajo de investigación y los sucesos que narra visualmente van en la tendencia, cada vez más fuerte, de caracterizar al Ejército mexicano como algo ajeno al pueblo. En otras palabras, desmitificar la idea de que la milicia es pueblo uniformado. Todo un tema.
Vea el video que circula en el canal de YouTube en el siguiente link: