Por Jaime García Chávez
El periodista Héctor de Mauleón publicó hoy en El Universal un artículo de opinión sobre la situación de la seguridad pública en el país, nutriéndose de fuentes oficiales a las que califica de cierta arbitrariedad metodológica, pero que al final aportan cifras aterradoras, con las ciudades de Chihuahua y Cuauhtémoc como parte de esa sangrienta estadística.
Según los datos recogidos por De Mauleón, entre abril de 2022 y marzo de 2023 Chihuahua, gobernada actualmente por el alcalde panista Marco Bonilla, ocupa el tercer lugar en la lista de las diez ciudades más peligrosas del país, donde los asesinatos pasaron de 313 a 382. En tanto Cuauhtémoc se equipara en la estadística al municipio mexiquense de Ecatepec. Específicamente, Cuauhtémoc fue otro de los municipios más violentos donde los asesinatos pasaron de 94 a 105 en el mismo periodo.
Estos datos duros desmienten la simulación tanto federal como local que hablan de una ciudad segura y “altamente competitiva”. En este caso, el gobierno panista de Chihuahua, en general, introduce distractores en la opinión pública que no permiten focalizar la atención en torno a una circunstancia verdaderamente alarmante, pero no porque se ignora deja de existir.
Texto de Héctor de Mauleón:
El gobierno federal dio a conocer hace unos días un documento según el cual la violencia en México había descendido 7.4%.
De acuerdo con especialistas consultados, se trató de una medición, por decir lo menos, arbitraria, que fue tomada de manera aleatoria, y sin que mediara explicación, en dos periodos: de abril de 2021 a marzo de 2022, y de abril de 2022 a marzo de 2023.
En el recuento de supuestos logros del gobierno federal, que en algunos casos llegó a celebrar como una tendencia la aparición de cuatro homicidios menos en alguna región, quedó el dibujo, de manera paradójica, de los que son hoy los 15 municipios más peligrosos de México.
A la cabeza de todos surgió Guaymas, Sonora, que de 135 homicidios contabilizados en el periodo marzo de 2020-abril de 2022, pasó a registrar, según las cifras del propio gobierno, 244 muertes violentas entre abril de 2022 y marzo del año siguiente: es decir, 109 homicidios más.
Guaymas se halla en el centro de la pugna entre el grupo de Los Salazar y los Chapos Trinis. En el estado gobernador por el ex secretario de seguridad del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, los grupos criminales disputan a tiros el tráfico de fentanilo, la trata de personas, el robo a las minas y a los trenes de carga, entre otras actividades delictivas.
El segundo municipio con mayor repunte de homicidios es Tijuana, Baja California, con cifras espeluznantes. Dicho municipio había presentado 1706 asesinatos entre abril de 2021 y marzo de 2022.
El documento del gobierno indica que entre abril de 2022 y marzo de 2023 llegó a 1809: agosto de 20022 fue uno de los meses más crudos para Tijuana, cuyo rosario de encajuelados, cuerpos metidos en hieleras, cobijas o bolsas de plástico; de cadáveres atados con cables; de huesos calcinados y gente acribillada o degollada, alcanzó ese mes los 170 casos.
Esa violencia no deja de escalar desde entonces: la ciudad es uno de los pasos estratégicos en la ruta del fentanilo hacia el norte, y en sus calles se enfrentan tres cárteles que quieren dominar a sangre y fuego: Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, y Tijuana.
Apenas este fin de semana, con diferencia de no más de tres horas, en calles de la ciudad perdieron la vida de manera violenta siete personas, a cinco de las cuales acribillaron en el mismo inmueble.
En el tercer lugar de los municipios más peligrosos durante ese periodo apareció Chihuahua, Chihuahua, donde los asesinatos pasaron de 313 a 382 (un aumento de 69).
Siguió Benito Juárez, Quintana Roo, en la lista del documento federal con un repunte de más de 60 muertos (317 en el primer lapso; 380 en el segundo): además de la ola de ejecuciones ocurridas en playas de Cancún en semanas recientes, este fin de semana se dio el hallazgo de cuatro cadáveres dentro de una cisterna, a solo ocho kilómetros de la ciudad, y otros tres cuerpos aparecieron en un ejido cercano a la zona urbana: un total de siete cadáveres en solo unas horas.
En la lista del gobierno federal, el quinto lugar de los municipios más peligrosos del país lo ocupó Salamanca, Guanajuato, que pasó de 141 homicidios entre abril de 2021 y marzo de 2022, a 190 entre abril de 2002 y marzo de 2023: 49 homicidios más.
San Luis Potosí, Cuernavaca, Morelos, y Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, ocupan los siguientes puestos en la lista de municipios mexicanos en los que los homicidios crecieron.
En San Luis pasaron de 216 a 253.
En Cuernavaca, de 170 a 203.
En Tlajomulco, de 240 a 273.
El listado indica que Chimalhuacán y Naucalpan, en el Estado de México, así como Chilpancingo, Guerrero, Irapuato, Guanajuato, y Acapulco, acumularon el mayor número de homicidios en el lapso estudiado.
Eh Chimalhuacán los homicidios pasaron de 106 a 136; en Naucalpan, de 139 a 168; en Chilpancingo de 67 a 93 (26), en Irapuato, de 222 a 246, y en Acapulco, problema eterno de México, de 446 a 461.
De acuerdo con la tabla, Cuauhtémoc, Chihuahua y Ecatepec, en el estado de México, cierran la lista de los municipios más violentos en ese periodo: en el primero, los asesinatos pasaron de 94 a 105; en el segundo, de 208 a 217.
Los estados en donde hay más de una alcaldía incluida en el listado son Guanajuato, el Estado de México, Guerrero y Chihuahua.
Es el mapa de los 15 municipios en donde la violencia no cede, trazado por el propio gobierno federal. Es el mapa donde la violencia registró un incremento de 14.2% en el número de homicidios dolosos.
Es ahí donde México se desangra.
Nota: ¡Pronta recuperación, presidente López Obrador!
@hdemauleon